Señales de que te has desconectado de ti mismo

Ahhh, la vida moderna y sus inconvenientes… Tantas prisas, tanta gente que manejar, tanto que actualizar, tantas metas que alcanzar. El problema es cuando entre mil tareas acabamos sintiendo que todo está fuera de lugar. Es el cerebro que ya no parece ser el mismo, nuestras ideas están todas desordenadas y el cuerpo ya ni siquiera se parece al nuestro. Todo un poco fuera de lugar, ¿sabes?

Señales de que te has desconectado de ti mismo

¿Has perdido la cuenta de cuántas veces te has sentido así? Lamentablemente te digo que es normal y más común de lo que parece. El problema es que aunque suceda más de una vez, todavía tardamos en darnos cuenta de qué se trata. Básicamente, es bastante sencillo, mucho más de lo que parece: te has desconectado de ti mismo.



Sí… puede sonar extraño, pero con tanta estimulación y tanta obligación, terminamos dejándonos un poco de lado cada día hasta que llega un momento en que ya ni siquiera podemos reconocernos.

Para ayudarlo a identificar si esto le está sucediendo, a continuación enumeramos algunas señales de que su conexión automática está fallando. Verificar:

Pérdida de interés en las cosas que te gustan.

Si tu pasatiempo favorito ya no te emociona y no parece tener mucho sentido, permanece atento. Podría ser solo una señal de un cambio natural, pero si es repentino o te parece extraño, probablemente sea una señal de desconexión. Cuando estamos lejos de nosotros mismos, nuestros más íntimos deseos y vocaciones se retiran. Puede parecer depresión o pereza, pero la posibilidad de desconexión es inmensa.

cambio de humor repentino

Señales de que te has desconectado de ti mismo

Te despiertas bien, en cinco minutos ya te estás quejando de la vida, te sientes culpable y te da un ataque de llanto y luego te da un ataque de risa. Ojo, ninguna persona equilibrada pasa por tantos estados de ánimo en tan poco tiempo, y menos sin motivo aparente. Es una clara señal de que hay una falta de armonía entre tus pensamientos, sentimientos y la vida que llevas.



Falta de empatía

Todavía en el mismo razonamiento del cambio de humor repentino, cuando estás desconectado tendemos a irritarnos más y no podemos entender el punto de vista del otro. La empatía parece desaparecer de nuestra personalidad y la gente tiende a retraerse. Si no te reconoces en tus actitudes hacia las personas con las que convives, es otro motivo de atención.

Sensación constante de ansiedad.

Simplemente no importa lo que estés haciendo, concentrarte es imposible. Cualquier otra cosa te parecerá más interesante y la ansiedad irá de la mano contigo. El ritmo rápido se encarga de todas tus acciones y siempre sentirás que necesitas hacer más.

Salud deteriorada

La somatización puede incluso afectar la salud física. ¿Te enfermas todas las semanas? Es una advertencia, sin duda. El cuerpo no puede funcionar como debería si su cerebro parece estar fuera de órbita. Es como si le dieras una misión a tu salud, pero no le das un manual de instrucciones sobre cómo debe lograr la meta.

todo esta fuera de lugar

Nada tiene sentido, no importa dónde mires, con quién hables o qué intentes hacer. Nada parece volver a ser como solía ser. ¿Ha cambiado todo o tienes algún problema? Refleja.

Cambiar tu vida parece muy difícil

Cualquier acción que intente tomar para salir de este ciclo de males parece infinitamente más difícil de lo que alguna vez fue. Meditar es una tarea ardua, la intuición parece no existir más, y ni siquiera esa fuerza de voluntad de la que siempre te enorgulleciste puede sacarte de esta. ¡Alerta máxima!


Para que todo vuelva a la armonía habitual, identificar y reconocer el problema es el primer gran paso. Luego basta con trabajar lentamente para que las actitudes cambien y, en consecuencia, hacer que todo vuelva a su eje correcto.


Presta siempre mucha atención a las señales que tu cuerpo y el universo que te rodea te envían a diario. Es a través de ellos que podemos retomar las riendas de nuestras vidas y entrar en una conexión perfecta con nuestro verdadero yo.

  • Texto escrito por Roberta Lopes del Equipo Eu Sem Fronteiras.
Añade un comentario de Señales de que te has desconectado de ti mismo
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.