¡Ponte siempre en primer lugar, mujer!

    Aprende a amarte más, acepta tus defectos, al igual que tus peculiaridades, enfrenta tus miedos, supera tus inseguridades.

    Aprende a adquirir la conciencia de que ya no es necesario humillarte ni aceptar migajas de nadie.

    Aprende a valorarte y aceptarte así: "imperfecto", pero con tus valores. Amarte a ti mismo hoy, amarte a ti mismo todos los días.

    ¡Acepta tus vulnerabilidades y ponte siempre primero!

    Ámate a ti mismo primero, siendo siempre lo mejor para ti y para ti!



    Algo muy común que mucha gente ha escuchado desde la infancia incluye frases como: “trágate el llanto”, “cállate”. El llanto se reconoce socialmente como un acto de debilidad o vergüenza, por lo que "debe evitarse".

    La ilusión de que debemos demostrar fuerza anula la idea de fragilidad.

    La fragilidad es una creencia cultural considerada limitante, por lo que es excluida. "Es feo, no se puede mostrar".

    Una persona fuerte y bien aceptada en la sociedad es aquella que solo toma actitudes racionales y controladas.

    Se necesita audacia para deconstruirte a ti mismo y buscar el autoconocimiento.

    ¡Ponte siempre en primer lugar, mujer!
    Luan Nunes / Pexels / Canva

    Comprende cómo funciona la mente misma, cuáles son las limitaciones del ser, sus dificultades y sus desafíos, que constituyen tu Ser Interior.

    Quien busca su propio desarrollo personal es valiente y se ama por encima de cualquier imposición.

    ¡Cuidarse es un acto de amor!

    Cuando creamos resistencia a las cosas que suceden a nuestro alrededor y queremos que todo sea a nuestra manera, sufrimos. Sentimos que somos débiles y nos desanimamos. Los asuntos internos y externos nos afectan.

    Hay que recordar que el mundo exterior es un reflejo del mundo interior. Y si queremos fortalecernos, debemos superar las barreras del miedo, entregándonos al cambio. A través del silencio. Tómate un tiempo para calmarte y darte cuenta de que todo pasa, porque nosotros somos la fuente de nuestra vida. Encontrar nuestro mayor propósito en esta vida es esencial. Entender que el mejor cambio es el que empieza por nosotros.



    Cuando nos sentimos débiles, también podemos darnos cuenta de que hay una voz interior que nos dice que podemos superar nuestros obstáculos.

    Observa y acepta que hay un tiempo para escuchar y conectarte con tu lado espiritual, simplificando la vida.

    ¡Ponte siempre en primer lugar, mujer!
    Vinicius Wiesehofer / Pexels / Canva

    ¡Tú no eres lo que te pasa!

    Vivimos en una sociedad que nos genera mucha angustia y, muchas veces, perdemos el control de la situación, porque nos afectan las demandas. Y generan estrés, depresión, angustia… pero no somos esas manifestaciones que se dan en nosotros.

    Para tener una vida más equilibrada, es necesario cambiar y romper con patrones masificadores. Trabajar nuestra cosmovisión. Redefiniendo nuestras creencias y valores. Sólo así nuestra vida será más ligera.

    También te puede interesar

    • Entender qué es el síndrome de la mujer incompleta
    • Saber si vives como una hembra alfa
    • Practica el amor propio para ser más feliz
    • Aceptación: un paso hacia lo mejor
    • El momento en que el tiempo pide calma
    • La decisión de ser feliz y aceptar la vida.

    A menudo pasamos por algunos problemas muy complicados para que podamos tener la oportunidad de cambiar todo lo que no está bien.



    Conéctate a tu poder personal y rompe las limitaciones que generan tantas distorsiones. Hazlo tu mismo. Todo se puede curar cuando podemos acceder a nuestro poder.

    Si me necesitas, estoy aquí para hablar.

    Programa una charla conmigo. En nuestra primera reunión, conversaremos para evaluar la mejor manera de llevar a cabo su proceso. No te preocupes, no cobro por esta conversación.

    Añade un comentario de ¡Ponte siempre en primer lugar, mujer!
    ¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.