¿Cómo evitar los pensamientos negativos?

Uno de los cuentos infantiles más representativos de todos los tiempos muestra a Peter Pan diciendo que pensamientos felices nos hacen volar. En otras palabras, para ir más allá de lo que puedas imaginar, debes tener optimismo, mantener la positividad en alto.

Sin embargo, todos pasan por una desgracia y tienen un mal pensamiento. Pero cuando se vuelve frecuente o rutinario, puede volverse dañino, incluso para el cerebro. ¡Por eso es importante saber cómo evitar los pensamientos negativos! Se trata de mantener el equilibrio y preservar la salud. ¡Aprende sobre esto a continuación!



¿Cómo nos afectan los pensamientos negativos?

Es parte de nuestro instinto de conservación defendernos de las amenazas. Por eso, priorizamos nuestra atención a lo negativo, para que no nos tomen por sorpresa. Por ejemplo, si escuchas en las noticias de la televisión sobre una ola de robos en el área donde vives, es probable que tengas un pensamiento negativo relacionado con el miedo y tendrás una actitud más cautelosa. El problema surge cuando nos aferramos a este tipo de pensamiento y lo convertimos en un patrón en nuestra forma de pensar, actuar y relacionarnos, haciendo que dure más de lo necesario para protegerse.

Según el estudio de 2018, titulado “Entrenamiento de interpretación para apuntar al pensamiento negativo repetitivo en el trastorno de ansiedad generalizada y la depresión”, del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King's College de Londres, Inglaterra, el pensamiento negativo repetitivo (rumia), común en personas que sufren de la ansiedad y la depresión clínicas, se pueden minimizar con la simple práctica de hacer interpretaciones positivas, reduciendo los efectos de estos trastornos y mejorando el estado de ánimo.

Cuando los pensamientos negativos se repiten, tienen una gran capacidad para afectar la salud mental y física de una persona. A la larga, pueden convertirse en ansiedad generalizada, trastorno de pánico y depresión. Esto se debe a que provocan una intensa descarga de emociones desagradables en el organismo, que impiden la producción de hormonas de la felicidad como la endorfina y la serotonina, desencadenando el estrés. Todavía pueden generar patologías físicas, como enfermedades cardiovasculares y trastornos digestivos.



¿Cómo evitar los pensamientos negativos?
EKATERINA BOLOVTSOVA / Pexels

Además, bajan la autoestima, influyen en los comportamientos, provocan sufrimiento y disminuyen el bienestar y la calidad de vida. Le quitan la oportunidad de pensar en positivo, agradecer, apreciar lo bueno de cada situación y reír, contagiando a la persona de tristeza, irritación, desánimo y estrés.

El pensamiento negativo, incluso sin conciencia, si es constante, puede causar daño y reducir la resistencia del cerebro al Alzheimer, según el estudio "El pensamiento negativo repetitivo está asociado con el deterioro cognitivo, amiloide y tau", publicado en la revista "Alzheimer's & Dementia ” (The Journal of the Alzheimer's Association, EE. UU.), en junio de 2020.

En el estudio, los investigadores encontraron que las personas con patrones de pensamiento negativos repetitivos tenían deterioro cognitivo y de memoria (uno de los primeros signos de la enfermedad de Alzheimer), siendo más probable que tengan depósitos de amiloide y tau en sus cerebros, biomarcadores de la enfermedad.

¿Cómo despejar la mente de pensamientos negativos?

Según el estudio de la “Universidad de Queen”, en Canadá, publicado en la revista científica Nature Communications en junio de 2020 bajo el título “Brain meta-state Transitions demarcate Thoughts Through Task Contexts Expoping the Mental Noise of Rasgo Neuroticism”, el humano adulto sano El ser produce más de seis mil pensamientos al día, tanto en vigilia como en reposo, ya sean positivos o negativos.

Evitar los pensamientos negativos es beneficioso para la salud mental y física, las relaciones interpersonales, la autopercepción, la carrera profesional y el desarrollo personal. Alimentar pensamientos positivos es una forma de protegerse de la negatividad y empoderarse para enfrentar los desafíos de la vida. Además, evita que las sinapsis cerebrales se especialicen en producir un patrón de malos pensamientos.



El cuidado de nuestros pensamientos, al igual que el ejercicio físico, debe ser una actividad permanente, ya que generan acciones. Si son negativos, es probable que no sean constructivos y saludables. Es necesario activar la neuroplasticidad y entrenar el cerebro para crear sinapsis que permitan un modelo optimista de pensar, actuar y vivir con mejor calidad.

¿Cómo evitar los pensamientos negativos?
Historias de DS / Pexels

Así, se pueden adoptar varias estrategias para que los pensamientos negativos solo cumplan su función de autodefensa y no se vuelvan repetitivos o resuenen en la mente, enfocándose en el pasado o el futuro y perdiendo el momento presente, donde en realidad está pasando todo. Son ellas:

1 – Descubre por qué existen

Intenta conocerte a ti mismo. Cuando conoces tus emociones, tus reacciones, la forma en que manejas tus sentimientos, tus frustraciones y tus limitaciones, descubres los desencadenantes de los pensamientos negativos y puedes definir acciones para mantener el autocontrol y el buen humor en cualquier circunstancia. Empiezas a tener una actitud más positiva ante algunas situaciones inevitables y más claridad de la realidad.

El autoconocimiento es importante porque con él es posible identificar las propias motivaciones, pensamientos, sentimientos y conductas. Para ello, algunas técnicas pueden ser de gran utilidad, como la meditación, el yoga, el mindfulness, la constelación familiar, el coaching, thetahealing, la psicoterapia, etc.

Incluso técnicas como la meditación, el yoga y el mindfulness ayudan a mantener el control de la mente, facilitando la identificación e intervención de pensamientos positivos y negativos. También te permiten concentrarte en el momento presente y promover una visión más objetiva de la realidad.

2 – Enfrenta tus miedos e inseguridades

Los pensamientos negativos pueden ser un instrumento de superación personal y de descubrimiento de las propias creencias, limitaciones, inseguridades, ilusiones y miedos, que acaban generándolos. Por lo tanto, pueden utilizarse como un recurso de empoderamiento y como un camino hacia la transformación. Buscar apoyo en terapias, alternativas o convencionales.



Es fundamental darse cuenta de que, ante los miedos e inseguridades u otros factores que pueden generar negatividad, es posible ver optimismo, amor, bondad, gratitud y compasión, es decir, hay oportunidades para ser más felices.

Incluso esta mirada sin críticas excesivas, enfrentándose a uno mismo de manera solidaria y resiliente, es una forma de no permitir que la voz interior siga diciendo en la mente: “Mira, ¿cómo eres incapaz de hacer eso?”. ¡Así que desafíate a ti mismo para mantener una relación saludable contigo mismo! Haz este viaje interior. Considera que el proceso puede ser enriquecedor. Si algo no funciona, vuelve a intentarlo hasta que lo consigas.

3 – Cultiva la gratitud

Adopta la práctica de la gratitud en tu vida. Aporta una mirada positiva a la realidad y te hace pensar en logros, buenos resultados, buenas actitudes y en tus propias fortalezas. Ayuda a valorar tus talentos personales y a elevar tu autoestima. Al mismo tiempo, nos permite extraer lecciones importantes de momentos difíciles. Incluso hace que sea más fácil reconocer los pensamientos sobre uno mismo, las personas, las situaciones y el mundo de una manera más consciente y positiva.

¿Cómo evitar los pensamientos negativos?
Pexels a través de Pixabay

El acto de dar gracias trae una visión que libera a las personas de la irritación, la impaciencia, la hostilidad, la impotencia y el papel de víctima de las circunstancias. Ayuda a dejar ir los arrepentimientos, a superar los fracasos, las decepciones y las frustraciones. Aporta satisfacción y amplía la percepción. Además, los conecta con la espiritualidad y la fe de que la vida está llena de milagros y bendiciones, de amor y co-creación.

Agradecer es una opción. Pero enseña compasión, perseverancia y perdón. Aumenta el entusiasmo y la eficiencia. Saca a relucir sentimientos de alegría, amabilidad y buen humor. Despierta la paz y la ligereza de la mente.

4 – Cambia tus hábitos

Para evitar malos pensamientos, es importante cambiar algunos hábitos para que den paso a pensamientos positivos. Vale la pena recordar que un hábito es algo que hacemos en piloto automático, sin mucha reflexión o con poca conciencia, porque es una especie de memoria, de conducta consolidada.

La cuestión es que, cuando queremos o necesitamos salir de la forma automática de pensar o actuar, suele prevalecer lo memorizado y pronto hay una justificación para seguir haciendo lo de siempre. Es autosabotaje. Es como si una voz interior dijera: “¡Es inútil hacer lo contrario!”. Funciona como una creencia limitante.

Entonces, cambiar los pensamientos negativos significa trabajar para romper ese camino mental. Para eso:

  • cuestiona tus justificaciones y creencias y permítete ver otros lados de una situación para cambiar el patrón.
  • revisa tus ideas, actitudes y permítete enfrentar tus emociones, aunque te traigan algún sufrimiento. Aprende de ellos. Rompe la autoprotección que bloquea tu desarrollo.
  • mira desde nuevas perspectivas, haz excepciones a tus propias reglas. Permítete pensar diferente. Rompe la rutina. Ejercitar la flexibilidad, evitando los juicios.
  • identificar los factores desencadenantes que impiden el cambio de hábitos. Por ejemplo, si cree que no le irá bien en cierta tarea, piense en lo que le hace pensar de esa manera. ¿Qué pasaría si lo hicieras? Permítete salir de la monotonía. Aventúrate a salir de tu zona de confort. Producir nuevos pensamientos, otras acciones, emociones y sentimientos. ¡Valórate a ti mismo! Respeta tu esencia. Promover una nueva mentalidad menos mecánica y más consciente.

5 – Espera y no te apresures

Una vez identificados los malos pensamientos, tómate tu tiempo y conecta con el momento presente, el aquí y ahora. Mantenga la calma y concéntrese en el proceso de desarrollar y fomentar pensamientos positivos. Recuerda, es un trabajo constante.

Habla con alguien en quien confíes o con un terapeuta sobre tus sentimientos, emociones y percepciones. Deja ir tus malestares para evitar el agotamiento mental, la crisis nerviosa, las rabietas, el dolor muscular y los ataques de llanto y ansiedad. No se deje intimidar ni dude y pida ayuda.

¿Cómo evitar los pensamientos negativos?
ANTONI SHKRABA / Pexels

Recuerda que se producirán pensamientos negativos. Sin embargo, deberían ser menos marcados que los buenos pensamientos. Si ocurre un mal pensamiento, piensa en algo feliz, un buen recuerdo, seres queridos, la belleza de la vida. Escuche música, vea una película divertida, charle con un amigo, lea un artículo interesante, camine, muévase, baile, aplauda o haga cualquier otra cosa que le guste hacer. ¡Pero no tengas prisa! Ve a tu propio ritmo. Asimilar y disfrutar de la nueva experiencia. Nútrete con confianza en ti mismo.

6 – Toma contacto con Dios

Una de las formas de eliminar los malos pensamientos es reconocer las bendiciones diarias que se brindan en forma de alegrías y logros, así como en forma de adversidad para promover el aprendizaje. Es conectarse a la espiritualidad y al Espíritu Santo que habita en ti y en cada uno de nosotros. ¡Así que ponte en contacto con Dios! ¡Rezar! Da gracias y pide ayuda divina para fortalecerte. Lea la Biblia Salmo 139.

Otras prácticas para evitar pensamientos negativos

Además de las acciones anteriores, se pueden adoptar otras prácticas con el fin de evitar pensamientos negativos y lograr una mejor calidad de vida. Entre ellos están:

1 – Relájate más

Esta es una sugerencia simple y efectiva, porque ayuda a la mente a cambiar de enfoque y alejarse de lo que está mal. Así que haz cosas que te brinden placer, que te animen y mejoren tu estado de ánimo. Conéctate con la naturaleza, respira hondo, date cuenta de la paz y la belleza que te rodean. Da un paseo y mira a tu alrededor, con una mirada de acogida y agradecimiento. Cocine, vea una película, lea un libro, vaya a una exhibición de arte. Mantén tu mente agradablemente ocupada.

2 – Ir a la terapia

Tanto para el autoconocimiento como para una intervención más asertiva y dirigida para eliminar los malos pensamientos, acude a terapia. Utiliza ayuda profesional, sin miedo a mostrarte y buscando tranquilidad de mente y cuerpo. Transfórmate con técnicas tradicionales o alternativas. Permítete conocerte a ti mismo. Aprende a meditar. Conéctate con tu espiritualidad. En fin, reencuéntrate, ¡reinvéntate!

3 – Rodéate de buenas personas

Los pensamientos positivos surgen de los buenos momentos, de los recuerdos construidos con situaciones de alegría y placer, en ambientes en los que nos sentimos confiados y seguros. Así que rodéate de buena gente, de buen humor y con la autoestima alta. Busque ejemplos constructivos de optimismo. Únete para charlar, para conocer ideas, nuevas formas de ver la vida. Tener una buena risa. Descubra que muchos tienen problemas similares. Busca estar con personas que ayuden a tu cerebro a producir hormonas de la felicidad.

4 – Parar de reclamar

Las quejas y los lamentos sacan a relucir el pasado y, por lo tanto, dan permiso para que surjan malos pensamientos. Así que concéntrate en la solución, el momento presente y las posibilidades de evolucionar. Cambia la perspectiva y comienza a nutrir el optimismo, con oportunidades para hacerlo mejor. Aprende de los posibles errores.

5 – Evita la información negativa

La televisión, la radio e Internet transmiten información de todo tipo, incluso negativa. Y si te enfrentas a algo trágico o triste, lee el salmo sugerido en este artículo o visualiza algo positivo y hermoso. No evites tus emociones. Mantén la empatía. Y déjalos fluir, pero no dejes que dominen tus pensamientos, especialmente si no influyen directamente en tu vida.

También te puede interesar

  • Comprender la relación entre los pensamientos y el propósito de vida.
  • Checa los beneficios que te pueden traer las frases optimistas
  • Amplia tus conocimientos sobre lo que es la gratitud

Finalmente, eliminar los pensamientos negativos requiere una decisión consciente y una acción persistente. Requiere encontrar el equilibrio. Si bien pueden ser beneficiosos en el sentido de autodefensa, si persisten, crean un patrón de comportamiento indeseable y pueden conducir a trastornos mentales, problemas físicos y de relación. ¡Es si! Los pensamientos positivos pueden hacerte volar. Promueven la autoconfianza necesaria para que tome medidas constructivas y evolucione. Así que esfuérzate para que tus pensamientos sean guiados por el optimismo y te traigan felicidad.

Añade un comentario de ¿Cómo evitar los pensamientos negativos?
¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.