Cuando buscamos en la literatura, nos encontramos con varios puntos de vista sobre un tema determinado. Por supuesto, en algunos parámetros hay convergencia de ideas, pero en muchos hay mucha divergencia. Y en algunos casos nada en los libros es similar, especialmente cuando se trata de creencia y fe.
Se dice que Jesús estuvo presente en la tierra en dos ocasiones principales. La primera fue cuando se formó el Globo, cuando se dieron los primeros pasos en la Creación, cuando se reunieron los Intérpretes de la Divina Voluntad. Jesús, como Gobernador de nuestro Planeta, presidía el gran laboratorio que era el escenario de la Tierra. En ese momento se dieron los primeros pasos en la Creación de los cuerpos materiales y también se vio el Principio Espiritual.
Luego pasaron billones y billones de años en la Tierra, luego las razas finalmente se arreglaron, y algunas desaparecieron.
Después de otro gran período, la humanidad ya muy avanzada, pero retrasada con relación a la actualidad, Jesús vuelve al Orbe, trayendo ahora el mensaje del Plan Cristo, es decir, a través del Evangelio del amor que se ha convertido hasta hoy en la base de la evolución moral de todos nosotros.
Este evangelio es algo que ya hemos experimentado en vidas pasadas y seguramente lo encontraremos en vidas futuras, con motivo de las reencarnaciones, porque es un compendio de ideas que es imposible asimilar y practicar en una sola existencia.
Pero Jesús, en estas dos ocasiones que estuvo en Misión en la Tierra, demostró cuánto nos ama. Primero dándonos forma de vida y luego cuando nació físicamente del vientre materno, teniendo como Madre a María y al Padre José.
Este mes estamos conmemorando el nacimiento de este Maestro que nos legó primero que debemos luchar para sobrevivir, porque eso fue lo que le sucedió a Él cuando sus padres tuvieron que huir a otra región para que pudiera nacer a salvo. También nos muestra que aunque tuvo una Misión Divina, y pudo haber nacido rey, prefirió provenir de una familia sencilla de trabajadores y nacer en un lugar improvisado, legándonos la más pura humildad y sencillez.
También podría gustarte:
- 5 señales de que has nacido para un propósito superior
- Infórmate con la miniserie “Conocí a Jesús”
- Descifrar cuál es el verdadero mensaje de Jesucristo
- Analizar el comportamiento humano desde la venida de Jesús
Hoy en día, con la carrera por el poder, el dinero, la posición social y la disputa por el espacio, vemos que aún estamos lejos de la perfección que pretendía el Creador y no le estamos dando importancia a lo que Jesús nos mostró. Vivimos abrazados al sufrimiento y la angustia, porque aún no somos capaces de practicar el verdadero amor al prójimo.
Agradecemos al Maestro por el esfuerzo y tratemos, cada día que pasa, de esforzarnos más en nuestro camino en busca de la purificación, porque sólo así nuestros días tendrán menos sufrimiento.
